Posibles complicaciones de la coroiditis central serosa

oftalmologo en La libertad

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James Brown

19 de marzo de 2021

El siguiente articulo es una vivencia muy personal e intima y no supone en ninguna medida que lo expresado en estas líneas pueda ser una constante aplicable a todas las personas que experimentan este tipo de condición, dicho lo cual, y aclarando que no soy profesional en oftalmología. Quisiera compartir unas cuantas líneas acerca de una experiencia muy personal con una condición que hasta el año 2015 ni siquiera tenia idea de su existencia, una condición que jamás creí que pudiese afectar en tan manera y mermar la salud de una de las personas que más amo en este mundo. -mi esposo-

Anhelo que este articulo, en alguna medida pueda contribuir o ser de utilidad para quien este experimentando una condición similar a la relatada a continuación:.

Para el año 2015 y con apenas 37 años de edad, mi esposo gozaba de una salud bastante privilegiada, su vida había sido siempre activa no solo por su profesión sino por su nivel de apego y buen habito por la actividad física. Una semana regular para él consistía en trotar 10 Kilómetros de 3 a 4 veces, nadar 5 km 3 veces por semana, y el infaltable! gimnasio, en donde mi esposo podía pasar cerca de una hora y media haciendo ejercicios con pesas.

En fin como pueden notar era muy activo, sin embargo y debido a su personalidad tipo A, tenia la tendencia a exagerar ciertos comportamientos, lo cual a priori creíamos que no podría tener ningún tipo de repercusiones, desafortunadamente, nos equivocamos! Ya que para finales del mes de marzo del año 2015, luego de regresar de unas vacaciones familiares, mi esposo sitió un escotoma o nubosidad en su visión central del ojo izquierdo, el cual y luego de algunas días se tornó en algo que él refería como: “ver a través de una gota de agua”, razón por la cual y sin demora decidimos visitar a un oftalmólogo.

Ya en la oficina del médico especialista, y luego de algunos exámenes, mi esposo fue diagnosticado con coroiditis central serosa, la cual y según nos informó el medico, es una condición oftalmológica muy típica en individuos con personalidad tipo A, y que muchas de las ocasiones remitía por si sola en unas pocas semanas o meses.

Aquí es donde verdaderamente surgió el problema -En pensar que el cuadro de mi esposo iba a remitir sin complicaciones luego de algún tiempo y sin necesidad de medicación como lo había indicado el oftalmólogo-. Desafortunadamente el cuadro no remitió nunca, por el contrario se torno en mucho más complejo, la visión central de mi esposo se había mermado en grado sumo, los objetos los percibía deformes, tenia una mancha que se en la visión central del ojo izquierdo que se tornaba cada vez más grande y opaca, es entonces cuando decidimos consultar con otro especialista quien luego de realizar varios exámenes, llego a la conclusión de que la coroiditis central serosa no existía más, sino que ésta, se había transformado en una neovascularización coroidea la cual y en caso de no ser tratada inmediatamente, desprendería la retina y conllevaría a una ceguera total

Afortunadamente aquel Médico oftalmólogo afirmo que si bien es cierto la coroiditis central serosa puede remitir sola y sin necesidad de medicación, es necesario mantener una vigilancia constante de su progreso.

Finalmente y luego de un tratamiento el cual consistía en inyectar un agente farmacológico en el ojo afectado, mi esposo pudo recuperar el 95% de su visión, quedando un 5% que se había convertido en una cicatriz la cual era ya irreversible.

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